En la mesa redonda ‘Nuevas fórmulas de movilidad urbana’ durante el #ObservatoriodelaMovilidad Luis Roca de Togores, presidente de la Junta de Compensación de Valdecarros y Rosalía Gonzalo, consejera delegada de Madrid Calle30 hablaron sobre el futuro en la movilidad de las ciudades.

Aunque la movilidad urbana sigue dependiendo en gran medida del uso del vehículo privado, la problemática medio ambiental y la concienciación respecto a la mayor calidad de vida urbana hacen que se avance hacia políticas de sostenibilidad urbana que apuestan por acelerar el uso de transportes blandos (a pie, en bicicleta o en patinete) y el uso de transporte público colectivo. Se trata de impulsar una nueva movilidad urbana que procura, en última instancia, la reducción y la descongestión del tráfico rodado en Madrid, el cuidado del planeta, y la implantación de hábitos más saludables.

Cuando empezó a planificarse el desarrollo urbanístico de Valdecarros se tomó como referencia un estudio de tráfico realizado en base a la encuesta domiciliaria de la Comunidad de Madrid. Una exhaustiva hoja de ruta que nos ha permitido basar en el transporte peatonal buena parte de lo que se denomina movilidad generada y movilidad atraída.

Actualmente, en el área de influencia de Valdecarros, el 25% de la movilidad se realiza a pie, un 25% en transporte público y más del 50% en vehículo privado.

Valdecarros se planificó con el objetivo de mejorar esas cifras. Primero a través de una tipología de calles que busca reducir la dependencia del vehículo privado; impulsando la movilidad más tradicional y eficiente, que es andar, y fomentando el uso de medios de transporte personal como patinetes, bicicletas y scooters.

Las previsiones de movilidad en el nuevo barrio son muy interesantes. Si hacemos la media entre movilidad generada y atraída, Valdecarros partirá con un aumento del transporte a pie y de la micro movilidad de casi el 20% sobre la media de los barrios próximos, de manera que más de un 40% de los trayectos se realizarán a pie, casi el doble que en las zonas adyacentes a Valdecarros

Además, contamos de partida con casi una cuarta parte de los trayectos en transporte público, un porcentaje todavía con margen de mejora y que esperamos impulsar antes de que las viviendas de las tres primeras fases comiencen a entregarse en los próximos años. De hecho, las tres primeras etapas ya cuentan con previsiones de conexión con el resto de Madrid a través de la línea 1 del metro y de al menos siete líneas de autobuses, aunque luego tendremos ocasión de ampliar ese punto.

Cómo pueden incentivar los nuevos proyectos urbanos el abandono del uso del coche para caminar más

La red viaria de Valdecarros cuenta con una longitud superior a los 102 Km. Así se garantizan accesos cómodos y accesibles a las diferentes superficies dotacionales, zonas de esparcimiento y zonas de trabajo.

Si pusiéramos en fila las calzadas peatonales y la red ciclista y de movilidad que habrá en Valdecarros, sumarían  127 kilómetros. Es decir, la distancia que hay por ejemplo entre Madrid y Ávila.

La red de itinerarios peatonales cuenta con aceras de entre 4 y hasta 9 metros de ancho en las calles secundarias y principales, respectivamente. De igual manera, los itinerarios peatonales accesibles y los pasillos visuales verdes, roturas en la ordenación que generan itinerarios verdes que cruzan la ciudad.

Con toda probabilidad, estamos ante la zona más llana de toda la capital. Si en adelante la maratón de Madrid quiere mejorar los tiempos de sus ganadores, una parte considerable de su trayecto debería transcurrir por Valdecarros.

Valdecarros está en condiciones de asentar un importantísimo pulmón verde de la ciudad, y de irradiar un modelo de movilidad centrado en el transporte sostenible, la accesibilidad peatonal y las mejores condiciones orográficas y dotacionales para impulsar el uso de bicicletas, patinetes y otras formas de movilidad sostenible.

Como pueden las grandes ciudades contribuir a modelos más sstenibles.

En el caso de Madrid, los nuevos desarrollos urbanísticos del sureste de la ciudad van a ser parte de la solución a la movilidad de la ciudad.  Madrid se caracteriza por una acusada jerarquización viaria que permite concentrar el tráfico en pocas vías (un 25%). 

La proximidad de Valdecarros a las redes estructurantes de la M-45 y de la M-50, así como las nuevas formas de movilidad que se implantarán en el nuevo barrio, ayudarán a fortalecer la movilidad transversal en la ciudad, donde hasta ahora se han priorizado los movimientos radiales.